Quizás a más de uno de vosotros os hayan hecho la putada de dejaros una pintada con espray en el coche. Por desgracia me tocó sufrir en mis propias carnes la impotencia de ver como un gilipollas eligió mi coche para gastar lo que le quedaba de pintura en su bote de espray.
Dejo el coche detrás del edificio donde trabajo y es una zona de paso de un colegio y un instituto, de hecho hay una tapia llena de graffitis de toyacos, con trazos burdos y sin técnica, por eso deduzco que son chavales los que los están haciendo (a parte de que están todos muy bajitos para ser pintados por un adulto jejeje).
Así que el otro día me avisa un compañero de trabajo que ha visto que en mi coche me han hecho un par de pintadas en las manetas de la puerta. No le dí tiempo a terminar la frase cuando salí escaleras abajo con el cuchillo entre los dientes dispuesto a hacer picadillo al primero que viera con un bote de espray, fuera o no el que me había hecho la pintada. Es lo que tienen las injusticias, te pintan el coche sin ningún motivo? Pues nada, tú le partes la cara a otro sin motivo alguno.
Pero no, allí no rondaba nadie y además comprobé que la pintura estaba muy seca, así que deduje que me la habían hecho al menos el día anterior, pero al ser el lado del acompañante no me había percatado hasta ese día.
Me puse en contacto con mi amigo Roc, de Ferretería L’Equip (Argentona) que muy amablemente vía twitter (@f_lequip) me ayudó a conseguir un producto del que hablan maravilla en los foros de chapa y pintura. Se trata del Acrysol y se vende en exclusiva a talleres de chapa y pintura, aunque después he investigado un poco he visto que venden «otro» acrysol en internet, mucho más barato aunque dudo de que sea tan efectivo como el que me regaló el bueno de Roc.
Aquí tenéis una foto del antes y el después (parezco la teletienda) de la pintada:
Como puedes ver en la foto, la maneta trasera estaba pintada a conciencia, me costó la misma vida sacarle los restos de pintura de las juntas, pero con la ayuda de un trapo de microfibra al que le metí dentro el mango de un cepillo de dientes (si, con eso haces más fuerza y arrastras más pintura) en unos 10min de trabajo quedaron así de bien ambas puertas. La maneta delantera a penas tenía un trazo (se le debió acabar la pintura al muy cabrón) pero en cambio ha sido la que más he tardado en sacar, porque casi tenía que ir gota a gota.
Si intentas limpiar algo así, te recomiendo mejor una pulidora o uno de esos accesorios que se le acoplan al taladro y que traen una muñequilla de algodón con la que frotas mucho más rápido y fuerte, dejando además la chapa completamente pulida.
Lo que véis en la foto ha sido todo a mano y ahora mismo casi no puedo teclear porque tengo los dedos entumecidos de hacer tanta fuerza. Chicas, ni lo intentéis hacer vosotras, mejor invitáis a una cerveza a vuestro vecino (o lo que se tercie) y que os lo hagan con la pulidora, es un trabajillo fácil pero duro.
En estas situaciones de vandalismo te encuentras tan indefenso que lo mejor es reducirlo a una anécdota más que contar, porque si pillas al niñato en pleno acto no le puedes hacer nada al ser menor. Si le das dos hostias malo, si le llevas a su casa a pedirle daños y perjuicios a su padre lo más seguro es que acabes a hostias con el padre porque si no educa a su hijo a respetar la propiedad ajena, qué tipo de persona esperas encontrar?
Lo dicho, te buscas en internet un bote de Acrysol, una pulidora y le dedicas media hora a dejarlo como los chorros del oro. Como es un disolvente puro muy bueno, de paso le fui dando al resto de la chapa donde tenía las marcas que dejan los conductores incivilizados al abrir la puerta de su coche. Frotando un poco salió también muy bien, así que no hay mal que por bien no venga, no?
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