Cuando tienes cubiertas todas tus necesidades primarias, cuando vives en una región donde hay buenas comunicaciones, no hay problemas graves de desempleo, hay una economía importante… Entonces es lógico que los políticos de baja talla moral se dediquen a explotar otro frente que les permita seguir viviendo del cuento.
Si vives en Extremadura, donde hay tantas carencias de infraestructuras, donde hay tanto desempleo y una inversión industrial escasa, entonces los políticos no tienen mucho tiempo libre, hay mucho que hacer para sacar del subdesarrollo a tu propia tierra como para preocuparse de otros temas más «filosóficos».
Todo empieza con el apagón que hemos sufrido estos días en Barcelona, por suerte vivimos en un pueblo a 25kms y no nos ha afectado, pero si he tenido problemas al ir a trabajar porque muchos semáforos no funcionaron durante 2 días.
Pero seguimos teniendo unos políticos que se preocupan más en multar a los establecimientos que no están rotulados en catalán(aunque el pobre comerciante lleve 50 años vendiendo sus zapatos en Zapatería Lázaro y ahora le han multado por no cambiarlo a Sabateria Llatzer) que en gestionar las pésimas infraestructuras.
Seguro que todos hemos visto más políticos catalanes (de esos que te dicen siempre cómo ser un buen catalán) reclamando el derecho a que Catalunya pueda participar con su propia selección en el próximo mundial de fútbol, que gestionando las infraestructuras energéticas para evitar este tipo de averías que afecta a todos los que pagamos impuestos, independientemente de nuestra visión de la historia.
Por eso siempre digo que los nacionalistas son los que mejor saben vivir del cuento, juegan con los sentimientos de los ciudadanos que ven en ellos a sus guerreros por sus libertades y contra el enemigo común, y se hacen olvidar su verdadero cometido en la sociedad, que es la de gestionar los recursos para poder vivir todos en igualdad de condiciones, independientemente de nuestra visión de la realidad.
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