Es pura casualidad que haya tantos pilotos en la Formula 1 cuyos apellidos lleven dos letras iguales y consecutivas? No te habías parado a pensarlo nunca?
Hagamos un recuento:
Button, Massa, Webber, Vettel, Barrichello, Raikkonen, Liuzzi, Trulli, Senna, di Grassi, Fisichella…
Y éstos son sólo pilotos que han participado en los últimos 2 años, porque si echamos la vista atrás la cosa es espectacular:
Häkkinen, Fittipaldi, Hill (hay varios), Surtees, Andretti, Mansell, Reutemann, Brooks, Siffert, Villeneuve…
Y podría seguir, porque es algo tan curioso que empiezo a pensar si no habrá una pauta en común en todo ésto.
Qué porcentaje de la población tiene dos letras iguales en su apellido, si reducimos la franja de población a los que sean hombres, menores de 30 años, que les gusten los coches, que tengan dinero suficiente para formarse como piloto y la enorme suerte de ser elegido como piloto de Formula 1, qué probabilidad tenemos, 1 entre 100 millones??? Y el hecho de que viendo la lista de pilotos de los últimos 2 años tengamos 11 que cumplan esa curiosidad, no resulta del todo imposible?
Tendrá algo que ver que el dueño de la Formula 1 se llame Bernie Ecclestone y su apellido también tenga dos letras repetidas?
Lo que está claro es que si a tu hijo le hace ilusión ser piloto de Formula 1 el día de mañana, lo primero que tienes que mirar es el primer apellido, si no hay dos letras repetidas lo tienes complicado. Que se haga notario.
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Actualizo:
Tengo que aclarar que este post se escribió en clave de humor, como una simple curiosidad que me vino a la cabeza una noche de insomnio. El que haya querido ver algo más allá está totalmente confundido, lo siento por los conspiranoicos esta vez.
Aunque siempre sale algo interesante de estas anécdotas, como que el mismísimo Ricardo Galli escriba un post analizando las posibilidades «reales» de que se produzca el hecho de que un piloto de la F1 tenga un apellido con dos letras repetidas consecutivas. En su cuidado post aumenta la cifra a un 68% de probabilidades de que un piloto de F1 cumpla con esta curiosa característica.
Ya le expliqué en un comentario que no me vale esa cifra (que respeto por supuesto). Porque no todos tienen las mismas ganas y/o posibilidades de ser pilotos, que no a todas las edades se puede optar a un asiento en un monoplaza, etc. Veremos hasta donde llega el tema, que parece que de una simple anécdota podamos llegar a sacar conclusiones interesantes, ya sea para alimentar las teorías conspirativas o para darle la razón a los amantes de las estadísticas y de la teoría del caos.
Por cierto, el propio Galli me ha recomendado un libro que tiene una pinta interesante y que trata sobre el tema. Se llama «El andar del borracho» y es obra de Leonard Mlodinow. Será cuestión de buscarlo, a ver si lo encuentro en formato eBook.
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