Cuando los niños rondan los 8-9 años suelen decantarse por la práctica de un deporte. Unas veces lo hacen obligados por sus padres (cuanto daño han hecho esas clases de karate de mala gana) y otras porque los chicos disfrutan practicándolo con los amigos.
Pero qué pasa si un día tu hija, la niña de tus ojos, tu princesita, te dice que ya ha elegido un deporte favorito? Te imaginas que te dirá que quiere hacer patinaje artístico, gimnasia rítmica, tenis o tal vez baloncesto con el resto de sus compañeras de clase… No amigo, tu hija ha descubierto su pasión por la halterofilia!
Le pondrías algún impedimento? Le apoyarías sin dudarlo? Tomarías en cuenta el posible rechazo social? Se lo explicarías o directamente se lo prohibirías (aquí mando yo!)?
Y si resulta que tu hija tiene un talento natural y en cuestión de unos meses de entrenamiento fuera capaz de batir el record del mundo de squat (sentadilla) para niñas de menos de 44kg? Pues eso es más o menos lo que le pasó al papá de Naomi Kutin, y mira ahora su hija lo que ha conseguido, batió el record del mundo levantando casi 85kg, una cifra impresionante si tienes en cuenta que la niña tiene sólo 9 añitos y pesa sólo 40kg!!! Y no, la nena no es ningún monstruo obeso ni con cara de veterano de guerra checheno.
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