Recojo el meme que me pasó Jesús para escribir un artículo sobre el sentido de la vida (en 200 palabras):
Con casi 31 años y con una niña en camino (falta poco más de un mes) el sentido de mi vida gira en hacer todo lo que pueda para que mi hija sea feliz.
Cuando no tienes las responsabilidades de mantener una familia piensas que la vida está hecha para vivirla a tope, sacar el máximo de experiencia en el menor tiempo posible y no te preocupa el futuro porque piensas que siempre será igual tu vida.
Quiero pensar que la vida es una barca y nosotros somos el agua (que poeta estoy hecho). Mucha gente será una gota que por si sola no lograría nada pero que unida a millones de gotas hacen que la vida continúe tal y como la conocemos. Hay gente especial que más que una gota son una ola, son las personas que aportan más de lo habitual a la sociedad (avances científicos, políticos, económicos, imperios…).
Dejando de lado las metáforas pienso que yo he llegado al mundo para luchar, disfrutar y sufrir a partes iguales.
Durante mis primeros años disfrutamos y luchamos más que sufrimos. A medida que te vas haciendo mayor disminuye el disfrute y aumenta el sufrimiento, pero la lucha se mantiene. Cuando sea viejo espero dejar de luchar para sufrir y disfrutar a partes iguales durante mi jubilación.
Por tanto, para mi el sentido de la vida está en colaborar para que todo siga funcionando y en la medida de lo que podamos intentar perpetuar la especie con hijos a los que enseñaremos las cosas buenas de nuestra sociedad.
Quizás suena demasiado pragmático y biológico, pero con los años entiendes que aquí sólo estamos de paso, así que en tu mano está hacerlo más o menos agradable a los demás.
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